Ayer fue el cumpleaños de una mujer admirable, de esas que con su presencia elevan cualquier espacio, y cuya esencia trasciende mucho más allá de su profesión. Nos referimos a la profesora Diana Piamba Escobar, afiliada a SINTRADEUA, y un verdadero ejemplo de excelencia, compromiso y calidez humana.
Nutricionista Dietista, con especialización en Administración en Salud Pública y Magíster en Salud Pública, su hoja de vida es tan sólida como su espíritu. Pero más allá de los títulos, que en ella son muchos y merecidos, lo que realmente marca la diferencia es su forma de ser. Educada, decente, amable con todos, con una sonrisa que inspira confianza y una actitud que deja huella.
Su experiencia de más de once años en el sector público y administrativo demuestra no solo su capacidad, sino también su vocación de servicio y su profundo compromiso con la salud comunitaria. Como docente catedrática de la Universidad del Atlántico, lleva su conocimiento y pasión a las aulas, formando nuevas generaciones con la misma entrega con la que ha servido desde instituciones como el Hospital Simón Bolívar y el Hospital de Usme.
Pero hay algo más, algo que no aparece en LinkedIn ni en los diplomas. Y es ese toque de elegancia natural, de nobleza silenciosa, de firmeza dulce. Diana es también madre, esposa, mujer en todo el sentido amplio de la palabra. Y quien tiene la fortuna de cruzarse en su camino, no puede sino admirarla.
Desde SINTRADEUA le expresamos nuestro más sincero reconocimiento, gratitud y afecto. Nunca es tarde para celebrar a quienes, como ella, nos recuerdan que la verdadera nutrición del alma viene de la bondad, la sabiduría y el trato respetuoso hacia los demás.
Feliz cumpleaños, profesora Diana Piamba. Que la vida le siga devolviendo en sonrisas todo lo que usted da con su ejemplo diario. Y que cada nuevo año le regale momentos tan luminosos como su presencia en este mundo.
