Uniatlántico necesita con urgencia la elección de un rector titular

figueroa

Según Roberto Figueroa Molina, es deber del Gobernador convocar para que se tome una decisión.

De los últimos 20 años relacionados con el mando en la Rectoría de la Universidad del Atlántico, unos 16 han sido de interinidad.

Las cuentas son de Roberto Figueroa Molina, el representante de los docentes en el Consejo Superior de la Universidad, y quien asegura que ese factor ha tenido una perjudicial incidencia en la dinámica administrativa, financiera y académica del alma máter.

En su visita a la sede de EL TIEMPO en Barranquilla, Figueroa hizo un repaso de la situación de la Uniatlántico, concluyendo que es urgente la elección del rector titular para enderezar la ruta.

 “La Universidad con un rector encargado es ineficiente, politizada. Se va por cuotas burocráticas y la contratación”, puntualiza.
Para el vocero de los docente es deber del gobernador Eduardo Verano convocar a los nueve miembros del Consejo Superior para que se tome una decisión, teniendo en cuenta que una notificación de la Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Quinta, del Consejo de Estado, hecha el pasado 4 de abril, despejó el panorama jurídico.
El rector titular de la Uniatlántico saldrá de tres aspirantes que cumplieron con la presentación de 25 etapas dentro del proceso que estuvo bajo la supervisión de la Universidad de la Sabana. Se trata de Rafael Castillo Pacheco, Salim Mattar y Carlos Prasca.
 
Es ganador el que obtenga cinco de los nueve votos de los consejeros, y es probable que esto ocurra el próximo 4 de mayo.
Figueroa le pregunta al gobernador Verano: ¿Qué es lo que quiere de la Universidad?

Efectos de la interinidad

Roberto Figueroa señala, a manera de casos, cómo afecta la interinidad a la Universidad la contratación que desborda los presupuestos.

“El año pasado, para esta época ya tenían 543 contrataciones que excedían los 10.000 millones que estaban presupuestados. Y diciembre se terminó con 826 contrataciones y excedió los 18.000 millones”, anota.

Un alto porcentaje de esa contratación, de acuerdo con el vocero, se hace mediante la figura de órdenes de prestación de servicios.

También indica que se entorpece el proceso de acreditación institucional y el de los programas. “La actual administración engaña. Dice que el Consejo Nacional de Acreditación le dio las condiciones para iniciar el proceso, cuando ya desde el 2011 esto se había dado”, sostiene.

Por último, Figueroa destaca la no conclusión de proyectos en materia de infraestructura que han demandado de millonarias inversiones. “Hay elefantes blancos en los que van más de 100.000 millones invertido: el Centro de Eventos; una casa de producción farmacéutica; y el edificio de investigaciones”.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.